Las edades de la muger
18.08.2021
Estaba claro que para el hombre medieval, además de la pureza de sangre visigoda, sólo contaba la mujer que vivía dentro de la ley y esta tenía un recorrido marcado de antemano, que no nos sonará tan desconocido a los nacidos en el siglo pasado. Esa mujer espejo de virtudes que cargaba con el gran peso de soportar por sí sola el honor de su esposo... y de todo el clan familiar.
Las mujeres malas eran aquellas que no seguían las normas, las que no formaban parte del selecto club del como Dios manda. Y en ese gran cajón de sastre, adúlteras, putas, alcahuetas, pobres de solemnidad, mancebas, o brujas, entre otras, encontraban su acomodo.